Este proyecto fue realizado durante mes y medio, en la fundación Mahanaim Centro Rural y Arte, ubicada en la vereda El Caucho de Barichara, Santander- Colombia. La exploración termino con 320 km recorridos a pie conociendo el territorio y recopilando valiosa información de sus vivientes, la plausible labor de sus campesinos y el conocimiento de sus técnicas han sido el alimento de este trabajo. 

La forma primigenia de recorrer un territorio y explorarlo es a través del caminar, es una excusa para identificar o reconocer el cuerpo como extensión de la tierra. La narración como el acto de viajar a pie pueden ser unas de las pocas formas de establecer una intrínseca relación con las comunidades y así mismo con nuestras raíces. Teniendo en cuenta las simbiosis infinitas entre lo colonial y lo propio se realizó un acercamiento a diferentes vínculos intentando exponer sus beneficios hacia la comunidad.

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Este proyecto estuvo encaminado a visibilizar algunas de las prácticas culturales ancestrales del territorio que están prontas a desaparecer, así mismo se posibilitaron conversaciones alrededor de la naturaleza y su protección. Aglomerando los relatos de la gente, sus prácticas artísticas, artesanales y laborales, además de los conocimientos que ya existían en mí, se establece un tamiz que filtra las diferencias para realizar un hibrido cultural que ayudó a desentrañar desde la práctica artística el territorio.